Vía Crucis con los santos

Este Vía Crucis recoge, en torno a las estaciones de la Pasión delSe?or, las meditaciones y testimonios de seis santos, ejemplo deseguimiento de Cristo y destacados defensores de la fe: san Agustín,san Juan de Avila, santa Teresa de Jesús, santa Teresa del Ni?o Jesús, la beata Teresa de Calcuta y el beato Juan Pablo II. A la piedad delos textos se une en estas páginas impresas a todo color la belleza de los mosaicos del padre Marko I. Rupnik, autor de algunas de las máshermosas decoraciones artísticas religiosas de la actualidad, como las que pueden admirarse en la Catedral de la Almudena, las capillas dela Clínica de la Beata María Ana de Jesús y de la ConferenciaEpiscopal Espa?ola, en Madrid, o el Santuario de Nuestra Se?ora deLourdes.Un Vía Crucis para meditar la Pasión con los santos en el A?ode la FePablo Cervera Barranco, sacerdote de la archidiócesis deMadrid, es doctor en Teología por la Universidad Gregoriana,licenciado en Filosofía por la Universidad Santo Tomás y diplomado enVida Religiosa por la Universidad de Letrán. Ha desempe?ado tareasdocentes en el ámbito de la eclesiología, la mariología y la doctrinasocial de la Iglesia. Actualmente es director de Pastoral de laFundación Universitaria San Pablo-CEU. Es autor, entre otros libros,del Rosario para el Tercer Milenio y de La belleza de la fe.El VíaCrucis es una manifestación de fe y uno de los ejercicios de piedadmás estimados para meditar la Pasión del Se?or, sobre todo durante eltiempo de Cuaresma y el Viernes santo. La tradición litúrgica proponea los santos como ejemplo de seguimiento de Cristo y esta inveteradacostumbre ha llevado al autor a presentarnos un florilegio, bienescogido, de seis defensores de la fe en este a?o de profundización ydifusión de la fe cristiana. Ellos, que han orado, nos ense?an a orar. Y así, san Agustín, san Juan de Avila, santa Teresa de Jesús, santaTeresa del Ni?o Jesús, la beata Teresa de Calcuta y el beato JuanPablo II, van desgranando sus vivencias, aspiraciones o meditaciones a partir de la Palabra de Dios contenida en la Biblia.