Nem vált be? Semmi gond! Nálunk 30 napon belül visszaküldheti
Ajándékutalvánnyal nem nyúlhat mellé. A megajándékozott az ajándékutalványért bármit választhat kínálatunkból.
30 nap a termék visszaküldésére
Con el placer de un coleccionista, Perec nos mostró que la literaturatambién es juego y que detrás del telón de la cotidianidad seencuentra la poesía de lo anodino. Tras la fachada de un simpleedificio parisino encontró un archivo de historias. Narrar es tambiénaprender a mirar, captar los relatos de vida que configuran esemonumental puzzle al que todavía llamamos realidad.Llegué a este libro en un momento en el que la literatura amenazabacon convertirse en un mundo demasiado melancólico. Encontré en él ungolpe de vida. Me enamoré de Bartlebooth y de su alocado proyecto,detrás del cual late una gran intuición: que la belleza a veces esinútil y por ende más bella. Recorrí las mil y una historias que acáse cuentan, arropado por el mismo asombro con el que imagino losrenacentistas debieron haber explorado sus gabinetes de curiosidades.Y supe que la literatura podía ser otra cosa: un juego muy serio querefleja nuestra sonrisa más pícara.Carlos FonsecaIlustración de cubiertaVioleta Lópiz